6 de noviembre de 2009

MÁLAGA: "La falsa normalidad. Todo a 30.000 euros".

NEGAR la evidencia es una práctica política a la que el PP debería renunciar. Una práctica incompatible con la regeneración de la política y con la credibilidad de los que la practican en busca de mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos.

EXISTE un rechazo generalizado de los ciudadanos a determinadas actuaciones como la utilización sectaria de las instituciones y administraciones públicas, viendo muy alejados los intereses de los partidos políticos de lo que debe ser el arte del buen gobierno.

SON muchas las voces críticas en la derecha española contra la gestión que de la trama que implica a los gobiernos de Valencia, la Comunidad Valenciana, Castilla y León y Galicia ha hecho el Partido Popular y, más concretamente, su líder Mariano Rajoy.

EL caso Palma Arena o la guerra intestina del PP madrileño entre Alberto Ruiz Gallardón, Esperanza Aguirre y Rajoy por el control de la cuarta entidad financiera de España, CajaMadrid, desangra la credibilidad de los españoles en las propias cajas de ahorro que parecen al servicio de los partidos políticos como un instrumento politizado y al margen de los intereses de sus administrados.

IGUAL les ocurrió con el caso Gürtel en el que Francisco Camps renegó de una amistad que quedó grabada para posteridad con uno de los cabecillas de Orange Market, su ‘amiguito del alma’ el Bigotes. Pasó a argumentar que sus trajes se los pagaba él, algo que hasta el fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana dejó en entredicho.

UNA denuncia del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Málaga ha sacado a la luz las adjudicaciones a dedo de obras en los distritos de Churriana y Campanillas a personas vinculadas al Partido Popular; constructores que en tres años han obtenido hasta 605.000 euros del mismo concejal del PP responsable de estos dos distritos de la ciudad.

EL alcalde Francisco de la Torre se apresuró a negar cualquier vinculación de este empresario al PP pese a que un acta del pleno del Ayuntamiento del año 2006 recogía su nombramiento como responsable del PP a propuesta de María Victoria Romero; pese a que había sido nombrado interventor del PP en las elecciones europeas de 2009 o a que existen fotografías tomadas en la Feria de Málaga de 2009 en las que acompaña da directores de distritos del PP e incluso al coordinador de la Ejecutiva Provincial de los populares.

MOLESTO por la denuncia socialista el alcalde mandó callar a los representantes de la oposición municipal pese a que una de las funciones atribuidas en el ejercicio de la democracia local es la labor de control y fiscalización del gobierno de la ciudad. Molesto por haber acudido a la sede del PP de Campanillas hace apenas dos meses, manchando su imagen con contrataciones a dedo con dinero de los malagueños al dueño de la sede.

UN nuevo tic autoritario de Francisco de la Torre que ante el acoso mediático suele perder el control de sus palabras y sus acciones. Pero la trama ha continuado y el alcalde ha optado por no desgastarse con declaraciones públicas que queden recogidas en las hemerotecas.

HA dejado a la portavoz del PP y concejala de Economía, Carolina España, correr con los riesgos de afirmaciones difíciles de mantener ante la opinión pública. Poco quiere el alcalde a su fiel colaboradora que se prepara para arder en el fuego eterno de lo indefendible.

CUATRO empresas han obtenido el 80 por ciento de las obras de los distritos de Campanillas y Churriana y se han repartido más de dos millones de euros en sólo tres años. El total, 77 contratos que por céntimos no han superado los 30.000 euros que marcaba la ley para las adjudicaciones a dedo. División de los contratos de manera artificial para evitar la libre concurrencia de otras empresas, negando el derecho a otras empresas a poder disfrutar del dinero que los malagueños pagan con sus impuestos, y que parece que el PP lejos de gestionar lo tiene reservado solamente para unos cuantos.

EL alcalde hace una propuesta para que la asociación de promotores y constructores les facilite un listado de empresas a partir de ahora. Si visitan la web de esta asociación podrán observar que las empresas se encuentran a disposición de los ciudadanos visitantes de la web. El alcalde reconoce que conceder a las mismas empresas ‘dedazos’ millonarios es por cuestión de agilidad. Es más fácil para un concejal del PP llamar al teléfono de un afiliado que buscar empresas para hacer las obras. Todo queda en casa.

EN Churriana y Campanillas ha costado igual pintar un colegio público que asfaltar tres calles, renovar una zona verde que arreglar la carpintería de un centro social, rebachear cuatro calles que realizar una rotonda. Todo a 30.000 euros y todo para los mismos.

SÓLO en la ciudad de Málaga existen más de 3.700 empresas de la construcción, mantenimiento y reparaciones y en Campanillas y Churriana el concejal del PP sólo repartía a cuatro de ellas. Incluso ha llegado a manifestar, en la tinta espesa de calamar que utilizan los que carecen de argumentos, su preocupación por el empleo en esas empresas sin medir que otras muchas pequeñas mercantiles han tenido que ir a la quiebra sin que el ayuntamiento de su ciudad haya optado por echar un colchón en forma de obra pública para mantener a sus trabajadores.

NADA enturbia el sueño a aquellos responsables del PP que administran los dineros de los malagueños con su conciencia. La falsa normalidad en la que conviven estas contrataciones a dedo con adjudicaciones de los fuegos artificiales a un concejal del PP de Valencia, a los que convocan en un procedimiento negociado a tres empresas de un mismo propietario argumentando que son amigos de un master o a los que mantienen a casi un centenar de cargos de confianza con sueldos millonarios procedentes de los malagueños y con el único mérito de tener el carné del Partido Popular.

EN Málaga el PP utiliza el Ayuntamiento de Málaga para sus intereses electorales y confunde la gestión del patrimonio de los malagueños con el de su cuenta privada. Esto no ha hecho nada más que empezar. De la Torre tiene preparadas nuevas sorpresas para los malagueños. La falsa normalidad de un lobo con piel de cordero pero sin admitir comisiones de investigación.


Sergio Brenes.

Concejal del PSOE del Ayuntamiento de Málaga.
Fuente: "Revista el Observador".

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